MĆ”s de 3 millones de estadounidenses mayores de 40 aƱos sufren de algĆŗn tipo de discapacidad visual. La pĆ©rdida de visión es una de las principales causas de discapacidad y de las enfermedades oculares relacionadas con la edad (AREDs, por las iniciales en inglĆ©s), las cuales se estĆ”n convirtiendo vertiginosamente en un problema de salud pĆŗblica en los paĆses desarrollados. La deficiencia visual causada por AREDS, puede conducir a otros problemas de salud graves, como la disminución de la movilidad, la depresión, las fracturas de cadera, y otros accidentes, ademĆ”s de a una baja calidad de vida en general. La mayorĆa de AREDs no tienen tratamientos eficaces, por lo que es importante mantener la salud ocular y prevenir el deterioro de la visión.
Las cataratas, el glaucoma, la degeneración macular relacionada con la edad y la retinopatĆa diabĆ©tica, constituyen los principales problemas. Las cataratas son las responsables del 51% de ceguera a nivel mundial. Cuando se tiene cataratas, la pĆ©rdida de la visión es causada por un aumento en la opacidad de la lente del ojo. Es uno de las AREDS mĆ”s fĆ”ciles de tratar ya que con la extracción quirĆŗrgica de las cataratas se puede restaurar con Ć©xito la visión. El glaucoma abarca un grupo de enfermedades caracterizadas por el daƱo del nervio óptico. Esta enfermedad es conocida como Ā«el ladrón silencioso de la vistaĀ» debido a la falta de sĆntomas especĆficos, lo que retrasa el diagnóstico y lleva a muchos pacientes a requerir medicamentos de por vida. La degeneración macular (DMAE) relacionada con la edad, causa la pĆ©rdida del campo central de la visión debido a la reducción del flujo de sangre a la mĆ”cula, una parte especializada de la retina. Es la principal causa de ceguera en los paĆses desarrollados. Actualmente, no hay cura para la AMD y sólo puede ser controlado por apoyo asistencial. Por Ćŗltimo, la retinopatĆa diabĆ©tica, una complicación de la diabetes padecida por muchos aƱos, es causada por el daƱo o deterioro de los vasos sanguĆneos que irrigan la retina, lo cual conduce a la pĆ©rdida de la visión.
La conexión de los ojos con el cerebro y con otras partes de nuestro cuerpo, requiere de miles de canales de comunicación formados por diferentes tipos de cĆ©lulas que funcionan juntas como un sistema visual. Las principales estructuras de este sistema son la retina, la esclerótica (capa externa), la pupila, el iris, la córnea, la lente, la mĆ”cula, el humor acuoso y humor vĆtreo, el disco óptico y el nervio óptico. Ciertos nutrientes son necesarios para el correcto funcionamiento y comunicación entre los diversos componentes de este sistema. Por ejemplo, la retina se compone de cientos de miles de receptores especializados: pequeƱos conos y bastones sensibles a la luz y responsables de la visión del color. La contracción del mĆŗsculo ciliar hace que se relajen las fibras que constituyen el ligamento suspensorio y, como consecuencia, el cristalino cambia de forma y se hace mĆ”s esfĆ©rico, aumentando su capacidad de refracción para poder ajustar y enfocar objetos. El nervio óptico lleva las seƱales y los impulsos de luz desde la retina hasta el cerebro y lo componen aproximadamente 1 millón de cĆ©lulas nerviosas. Nutrientes naturales como el aminoĆ”cido cisteĆna, vitaminas C y E y el Ć”cido lipóico trabajan en sinergia para proteger las funciones fĆsicas del nervio óptico. Los vasos sanguĆneos que suministran sangre y nutrientes a los ojos, estĆ”n hechos de cĆ©lulas que requieren el aminoĆ”cido arginina para la contracción y la relajación, y la vitamina C para asegurar una óptima producción de colĆ”geno para apoyar la integridad y firmeza de los vasos sanguĆneos. La vitamina C es conocida por reducir la presión ocular. Sin embargo, el contenido de vitamina C en los ojos disminuye naturalmente con la edad y se requiere de una suplementación adicional.
Enfermedades circulatorias relacionadas con la edad, como la diabetes, la hipertensión, los accidentes cerebrovasculares, el daƱo de los radicales libres causados por la luz ultravioleta, el tabaco y otras sustancias quĆmicas tóxicas son los factores de riesgo mĆ”s comunes para la mayorĆa de las AREDs. Por otra parte, los contaminantes ambientales y medicamentos como los esteroides, antidepresivos y anticonceptivos orales tambiĆ©n contribuyen a una carencia de nutrientes y a estas mismas enfermedades. AdemĆ”s, la exposición a la luz artificial, ordenadores, televisores y demĆ”s pantallas se estĆ” convirtiendo en el principal causante de la fatiga visual significativa en la población mĆ”s joven, lo que lleva al desarrollo precoz de problemas visuales. Aunque no podemos parar el envejecimiento, podemos evitar sus efectos negativos en nuestros ojos. Un estilo de vida saludable, incluyendo la abstinencia de los factores de riesgo daƱinos y el suministro apropiado de nutrientes celulares para fortalecer la salud ocular, ayudarĆ” a mantener una visión óptima.