Un estudio de intervención clĆnica aleatorizado y controlado con placebo en pacientes en etapas avanzadas de COVID-19 ha documentado que la vitamina C en dosis altas puede reducir la tasa de muerte casi a la mitad en comparación con un grupo de control que recibió el placebo.
El estudio clĆnico multicĆ©ntrico fue coordinado por el Hospital Universitario de Wuhan, China, el sitio del brote de la pandemia actual. Incluyó a pacientes con COVID-19 ingresados en unidades de cuidados intensivos debido a la gravedad de la etapa potencialmente mortal de sus infecciones. Todos estos pacientes gravemente enfermos recibieron tratamiento mĆ©dico estĆ”ndar. AdemĆ”s, un grupo de estudio recibió dosis diarias de 24 gramos de vitamina C por vĆa intravenosa, mientras que otro grupo recibió un placebo. La administración de vitamina C mostró una reducción de la tasa de muerte (mortalidad) en aproximadamente la mitad, en comparación con los pacientes que solo recibieron el placebo.
Los pacientes que recibieron tratamiento con vitamina C tambiĆ©n tuvieron una oxigenación significativamente mejor de su sangre, lo que indica que el oxĆgeno puede difundirse mejor a travĆ©s de las cĆ©lulas alveolares del pulmón para saturar los glóbulos rojos. Esto significa que el tejido pulmonar estaba menos inflamado, un hecho que fue confirmado en este estudio por niveles mucho mĆ”s bajos de los marcadores inflamatorios (interleucina-6) en los pacientes que recibieron vitamina C. Sin embargo, fue particularmente significativa la probabilidad mucho mayor de supervivencia para aquellos pacientes con COVID-19 que recibieron altas dosis de vitamina C, y este tratamiento no tuvo efectos secundarios.
El estudio menciona como una de sus limitaciones el hecho de que no se pudo dilucidar el mecanismo que explica cómo funciona la vitamina C, o si tiene un efecto directo sobre el virus. Esta respuesta ya se ha mostrado en una serie de estudios de investigación realizados en el Instituto de Investigación CientĆfica del Dr. Rath en California, bajo el liderazgo de la Dra. Alexandra Niedzwiecki. Estos estudios muestran que la vitamina C inhibe varios mecanismos claves de las infecciones por coronavirus, incluida la regulación de las puertas a los receptores virales en la superficie de las cĆ©lulas del cuerpo humano. MĆ”s importante aĆŗn, combinada con otros micronutrientes, la vitamina C mejora los efectos antivirales, incluida la inhibición de la unión de los coronavirus a los receptores en la superficie de las cĆ©lulas.
Esta investigación combinada y los resultados clĆnicos tienen implicaciones significativas para las estrategias de salud preventiva a escala mundial. A diferencia de una mayor intervención, las sustancias naturales como las vitaminas ejercen su eficacia mediante la regulación del metabolismo celular. Como ley de la biologĆa, cualquier sustancia natural que pueda tratar con Ć©xito una enfermedad, es decir, corregir el mal funcionamiento celular, debe, por regla general, prevenir el mal funcionamiento en primer lugar. Las investigaciones y los estudios clĆnicos ahora pueden explicar el hecho sorprendente de que, aparte de los humanos, ningĆŗn otro animal sufre una pandemia de coronavirus: pueden infectarse, pero no enfermarse. A diferencia de los humanos- que no pueden producir vitamina C en sus cuerpos- la mayorĆa de los animales producen vitamina C, en función de su peso corporal, comparable a la cantidad administrada a los pacientes con COVID-19 en este estudio clĆnico:
La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó recientemente una evaluación oficial de datos globales esencialmente sobre todos los fĆ”rmacos que hasta ahora han sido promovidos por compaƱĆas farmacĆ©uticas y algunos polĆticos como respuestas a la pandemia de COVID-19. El informe de la OMS concluye: Ā«El uso de Remdesivir, Hidroxicloroquina, Lopinavir e Interferón parecen tener poco o ningĆŗn efecto sobre los pacientes hospitalizados con COVID-19, como lo indica la mortalidad en generalĀ».
En varios paĆses, los ensayos clĆnicos con vacunas experimentales han tenido que interrumpirse debido a los graves efectos secundarios. Estos ensayos han incluido vacunas de prueba muy promocionadas de Astra Zeneca / Universidad de Oxford, Johnson & Johnson y Eli Lilly. Todos estos estudios probaron vacunas de base genĆ©tica que se transportan al nĆŗcleo de las cĆ©lulas humanas a travĆ©s de otro virus (por ejemplo, un adenovirus). No solo las vacunas, sino toda la tecnologĆa basada en la modificación de la información genĆ©tica dentro de las cĆ©lulas del cuerpo de las personas, es altamente experimental y se ha asociado con graves efectos secundarios despuĆ©s de su primera aplicación.
Las vacunas basadas en proteĆnas, segmentos de proteĆnas (pĆ©ptidos) o anticuerpos,Ā involucran tecnologĆas ampliamente utilizadas durante muchas dĆ©cadas, que merecen una evaluación adicional. En contraste, las vacunas de base genĆ©tica son altamente experimentales. Su principio terapĆ©utico es interferir sistemĆ”ticamente con las molĆ©culas de la herencia (ADN) y / o con las molĆ©culas que regulan la sĆntesis de proteĆnas (ARN). Desafortunadamente, esencialmente todas las vacunas actualmente desarrolladas a nivelĀ internacional se basan en esta tecnologĆa experimental. Incluso si alguno de estos estudios mostró algĆŗn efecto en estudios a corto plazo, las consecuencias a mediano y largo plazo de las vacunas en toda la población podrĆan ser potencialmente catastróficas, incluidas alteraciones irreversibles en los genomas de millones de pacientes, o incluso en el genoma humano en su conjunto.
La Ćŗnica razón de por quĆ© los polĆticos estĆ”n considerando campaƱas de vacunación basadas en tecnologĆas experimentales de alto riesgo es porque los Ā«expertosĀ» les dijeron que no hay alternativas efectivas. Sobre la base de pruebas cientĆfica y clĆnica disponible, estĆ” claro que la vitamina C y otros micronutrientes son terapias efectivas y seguras que pueden ser utilizadas inmediatamente por personas de todo el mundo para controlar la pandemia actual.
Los polĆticos y los medios de comunicación que opten por ignorar esta evidencia cientĆfica pueden sufrir las consecuencias de varias formas. Es posible que sus electores los responsabilicen por no proporcionar información sobre los beneficios de las vitaminas para la salud que podrĆa salvar vidas. TambiĆ©n pueden enfrentar demandas de responsabilidad provenientes de los pacientes, si las vacunas experimentales que recomiendan causan graves efectos secundarios, incluidas alteraciones genĆ©ticas.
El Dr. Rath comentó: āA partir de ahora, ningĆŗn polĆtico que defienda fĆ”rmacosĀ ineficaces o vacunas genĆ©ticas de alto riesgo para sus ciudadanos, puede afirmar que no tuvo otra alternativa. La Ć©poca de la parĆ”lisis global ante la pandemia del coronavirus ha terminado, y tambiĆ©n la espera de una Ā«vacuna milagrosaĀ» que sea segura. Todas las personasĀ Ā tienen ahora el enfoque natural cientĆficamente y clĆnicamente probado en sus propias manos, que puede ayudar a que la vida en la Tierra vuelva pronto a la normalidadā.
Referencias:
Clinical study on the use of high-dose vitamin C in the treatment of COVID-19: https://www.researchsquare.com/article/rs-52778/v2
Research on the effectiveness of micronutrients in COVID-19 of the Dr. Rath Research Institute: https://www.dr-rath-education.org/
Website of the Dr. Rath Research Institute: https://drrathresearch.org/
WHO-study on Remdesivir, Hydroxychoroquine, and Lopinavir:https://www.medrxiv.org/content/10.1101/2020.10.15.20209817v1
The dangers of fighting corona with adenovirus vaccines: https://www.dr-rath-education.org/the-dangers-of-fighting-corona-with-genetic-vaccines/
Contacto:
Dr. Aleksandra Niedzwiecki, Email: contacts@drrath.com